Tandil, ubicada al centro este de la provincia de Buenos Aires, es una ciudad rodeada de bellezas naturales que atraen a turistas de todas partes del mundo. Entre ellas, se destacan sus parques y atracciones naturales, que ofrecen una experiencia única y emocionante para aquellos que buscan conectarse con la naturaleza y disfrutar de actividades al aire libre. En este artículo, te presentaremos los parques y atracciones más destacados de Tandil, para que puedas planificar tu próxima escapada y descubrir lo mejor de la naturaleza de esta hermosa ciudad.
Parques y atracciones naturales de Tandil
1. Parque Independencia
El Parque Independencia es uno de los lugares más visitados en Tandil, y tiene una vista panorámica impresionante de la ciudad. Nos encantó la facilidad de acceso al parque, ya que incluso los menos atléticos disfrutarán la caminata. En cuanto a la confitería, nos pareció excelente, y los puestos estaban muy bien. Sin embargo, hay que tener en cuenta que si la confitería anda cerrada, la oferta gastronómica será limitada.
Aunque no hay mucho que hacer en el Parque Independencia, es un lugar hermoso para pasar un rato agradable. Nos encantó la vista panorámica de la ciudad, las torres y los cañones que parecen un fuerte. Las instalaciones de venta son muy necesarias para descansar después de la caminata. Sin embargo, algunos visitantes observaron que la falta de mantenimiento es evidente y esto podría restarle atractivo al parque.
Visitamos el Parque Independencia en un día en que llovía, sin embargo, pudimos notar la energía especial que hay en el aire en todo Tandil. A pesar de que nuestro tiempo allí fue limitado, pudimos disfrutar de la hermosa vista que ofrece el parque. Si buscas un lugar para relajarte y respirar aire puro, el Parque Independencia es una excelente opción.
2. Piedra Movediza
Uno de los lugares que visitamos en Tandil fue el Parque Lítico la Movediza, que alberga una réplica de la famosa piedra movediza que se desplomó en 1912. A pesar de ser una réplica, nos resultó interesante conocer su historia y disfrutamos de la vista panorámica de la ciudad, sobre todo al visitarlo en un día de semana, que no estaba tan concurrido. Sin embargo, encontramos que la reproducción de la piedra es bastante pobre, y está pintada de gris a los pincelazos, lo que la hace ver bastante artificial. A pesar de eso, consideramos que vale la pena visitar el parque por la vista que se puede disfrutar desde el lugar.
El Parque Lítico la Movediza es un lugar para recorrer y disfrutar de los puntos panorámicos de la ciudad. Nosotros llegamos caminando desde el centro, y aunque son unos 5.5 km de ida y vuelta, el recorrido es muy bonito. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la subida requiere un esfuerzo medio y no es apta para personas con movilidad reducida o niños muy pequeños. En cuanto a la piedra movediza, encontramos que la réplica está bien lograda, aunque nos sorprendió la cantidad de trapitos que hay en el lugar pidiendo plata a los turistas, ya que el estacionamiento es libre y gratuito.
Aunque disfrutamos del recorrido hasta llegar a la piedra movediza, encontramos que la zona en la que se encuentra no es muy segura y agradable. Había muchas motos con mucho ruido yendo y viniendo justo cuando estacionábamos al pie de este lugar que tiene un pequeño estacionamiento. Además, durante nuestra visita, el paseo de artesanos que hay en la zona del estacionamiento estaba cerrado y los baños también, lo cual resultó un poco incómodo. Por todo lo demás, encontramos que es un clásico de la ciudad que vale la pena visitar, pero recomendamos llevar líquido, gorra para el sol y evitar llevar bultos ya que la subida es bastante compleja.
3. Parque del Origen
Visitamos el Parque del Origen en Tandil y tuvimos una grata experiencia. Este lugar es una excelente opción para pasar una tarde en familia y disfrutar de la naturaleza. Lo que más nos encantó fueron las réplicas de dinosaurios que se encuentran en el parque, están muy bien realizadas y los niños disfrutan mucho al verlas. Además, este parque ofrece una caminata entretenida con subidas y bajadas seguras, lo que lo convierte en una actividad perfecta para hacer con los pequeños. También pudimos apreciar que el parque está muy bien cuidado y limpio.
Otra ventaja de este parque es que cuenta con un amplio espacio para recorrer y juegos para niños. Es ideal para llevar el mate y merendar mientras se disfruta del aire libre. Sin embargo, como señalamos en una reseña anterior, hay un parque de juegos peligroso que puede ser un riesgo para los niños. Sería importante que las autoridades del parque lo revisen y avalen su seguridad para evitar posibles accidentes.
En resumen, recomendamos visitar el Parque del Origen en Tandil. Es un parque muy grande con réplicas de dinosaurios en un entorno natural, que ofrece un paseo original y divertido para hacer en familia. Es un lugar excelente para pasar la tarde al aire libre, merendar y disfrutar de la belleza natural de la ciudad.
4. Plaza Independencia
Si hay un lugar que no te puedes perder en Tandil, ese es Plaza Independencia. Nosotros estuvimos recorriendo la ciudad durante tres días y esta plaza fue uno de los sitios que más disfrutamos. Una de las grandes ventajas de este lugar es que, además de ser un espacio verde muy grande y limpio, está rodeado de excelentes restaurantes en los que se puede probar la gastronomía local más exquisita. Durante nuestra visita, nos encantó comer en uno de los restaurantes alrededor de la plaza y disfrutar de la hermosa vista.
Pero, sin duda, lo que más nos sorprendió de Plaza Independencia fue su estética. La plaza es muy bonita y está muy bien cuidada. Nos llamaron la atención los naranjos alrededor de la plaza, que le dan un toque pintoresco, y el calendario con plantas que cambia cada día. También admiramos las esculturas que acompañan el recorrido. La única desventaja que encontramos es que quizás le falta un poco más de iluminación, sobre todo durante la noche.
Otro gran lugar que nos encantó de Tandil fue el Parque Independencia, que es una extensión de la plaza. Es un parque muy grande y bien cuidado que se presta para caminar, sentarse a contemplar la naturaleza o hacer un picnic. Lo que más nos gustó fue que había muchas áreas verdes y sitios donde relajarnos. De hecho, después de un día agitado, nos vino de maravilla pasar un rato en el parque.
En resumen, consideramos que la Plaza Independencia de Tandil es uno de los lugares imprescindibles que debes visitar, ya que es un espacio verde precioso y cuenta con estupendos establecimientos gastronómicos en su entorno. Además, podrás visitar el Parque Independencia, muy recomendable si deseas relajarte contemplando la naturaleza. Si bien debería tener un poquito más de iluminación, en general, nos pareció una plaza hermosa, limpia y bien cuidada para disfrutar durante todo el día.
5. La Cascada
Si buscas un lugar para conectar con la naturaleza, La Cascada es un punto obligado en tu visita a Tandil. Localizada en medio de la sierra y camino al dique, este parque ofrece paisajes naturales impresionantes y sorprendentes lugares para descubrir. A pesar de que el acceso puede resultar un poco complicado y agreste, el esfuerzo se ve recompensado cuando las vistas empiezan a desplegarse frente a nuestros ojos. La experiencia de caminar por senderos naturales y subir por la sierra puede resultar exigente para personas mayores o con bebés, pero aquellos con un poco de agilidad corporal encontrarán el desafío muy gratificante.
No obstante, es importante que tengas en cuenta que la visita a La Cascada está totalmente condicionada por las condiciones climáticas. Si bien en cualquier época del año se puede disfrutar del parque y sus senderos, la mejor experiencia se tiene luego de una buena lluvia que garantice el flujo de agua en la cascada. En caso contrario, la cascada será apenas un hilo de agua, aunque el entorno natural seguirá siendo sin duda muy atractivo y disfrutable. También es importante mencionar que en los caminos se pueden encontrar animales como vacas o cabras, lo que le da un toque aún más auténtico y natural al parque, aunque pueda resultar sorprendente para los visitantes menos acostumbrados a esta clase de experiencias.
En resumen, La Cascada es una de las atracciones naturales más populares y sorprendentes de Tandil, pero su visita requiere de un poco de preparación y un buen criterio a la hora de evaluar las condiciones climáticas. Quienes decidan aventurarse a conocer este parque no deberían perder la oportunidad de explorar sus senderos y sorprenderse con los paisajes naturales que se abren frente a sus ojos, además de estar dispuestos a vivir una experiencia auténtica en contacto con la naturaleza más salvaje de la región.
6. Sierra de Las Animas
Nos encantó conocer Sierra de Las Animas, uno de los lugares más sorprendentes de Tandil. Se trata de un recorrido con espectaculares vistas panorámicas, que permite estar en contacto con la naturaleza a pocos minutos del centro de la ciudad.
El sendero de las Ánimas es uno de los lugares más destacados, ya que permite recorrer un bosque y disfrutar de una caminata tranquila, ideal para conectar con la naturaleza. El recorrido es desafiante en algunos tramos, pero su esfuerzo se ve recompensado con vistas impresionantes.
Uno de los aspectos a mejorar es la falta de señalización clara, lo que hace que sea fácil perderse en el sendero, por lo que recomendamos estar atentos para no extraviarse. A pesar de esto, es un lugar para disfrutar a pleno, siendo una excelente alternativa para aquellos que buscan alejarse del ruido de la ciudad y disfrutar de la belleza del paisaje.
En resumen, Sierra de Las Animas es una opción recomendada para todos aquellos que deseen disfrutar de un recorrido al aire libre en Tandil, rodeados de naturaleza, aire puro y vistas espectaculares. Sin duda, es uno de los secretos mejor guardados de la ciudad, que merece ser descubierto por propios y extraños.
7. Sierra del Tigre Natural Reserve
La Sierra del Tigre Natural Reserve es un lugar interesante para los caminantes que buscan una vista diferente. Aunque hay pocas sombras, se puede recorrer en una hora y media. Lo mejor es que hay un camino desde arriba que llega al Cristo de otro cerro y se puede ver algunos animales, incluyendo cinco burros y caballos. Sin embargo, en la base de la reserva hay poquitos animales que parecen descuidados. La entrada no es barata, ya que sale $700 por mayor de 10 años, pero se puede recorrer en auto aunque hay que tener cuidado con las piedras si el vehículo es bajo. Recomendamos ir a primera hora de la mañana o al atardecer para evitar el calor y disfrutar de las vistas.
La promocionan como una reserva natural con animales y demás, pero en realidad solo se pueden ver un par de burros, patos y poco más. Aunque es una caminata entre cerros interesante, el precio de la entrada es excesivo (900 mangos) para solo caminar entre las piedras, cosa que se puede hacer de forma gratuita en cualquiera de los cientos de cerros que tiene la ciudad. No recomendamos esta reserva si se busca una experiencia con animales o servicios adicionales.
A pesar de lo anterior, la Sierra del Tigre Natural Reserve es un hermoso lugar para hacer ejercicios o recorrer caminando. Tiene vistas impresionantes y el recorrido es de aproximadamente 3,5 km, lo que permite terminarlo en una hora. Aunque no se ven muchos animales, el paisaje vale la pena y es una buena opción si se busca pasar un buen rato en la naturaleza. Aunque hay un mini zoologico en la entrada con pavos reales, conejos, loros, que parecen estar muertos de hambre y acercarse desesperadamente a la gente buscando comida, angustiando un poco a los visitantes. Las cinco estrellas son por el paisaje maravilloso que ofrece este lugar.
8. Cerro de la virgen
El Cerro de la Virgen es un lugar que puede resultar interesante para aquellos que buscan un momento de paz y tranquilidad en contacto con la naturaleza. Aunque su acceso puede resultar un poco difícil si no se cuenta con un vehículo, el paisaje que se aprecia desde la cúspide de la colina es impresionante y vale la pena el esfuerzo. Además de la vista, en el camino es posible encontrarse con algunos animales autóctonos, como los burros que se acercan para pedir comida.
Sin embargo, hay opiniones que sugieren que la visita al Cerro de la Virgen está más destinada a quienes buscan un espacio de oración y meditación que a quienes quieren hacer turismo. De hecho, la gruta de la Virgen María es el principal atractivo y en sí no hay nada más para hacer o ver. Si quieres relajarte y disfrutar del paisaje campestre, es posible tomar unos mates a la sombra de los árboles que rodean el lugar, pero en general, la visita no llevará más de unos 20 minutos.
Aun así, si planeas hacer una escapada de fin de semana en Tandil, el Cerro de la Virgen puede ser una buena opción. Ubicado a unos 15 km del centro de la ciudad, junto al camino que lleva a la cascada, este paraje mantiene el aire de lo no tan explotado, lo que hace que la experiencia sea aún más auténtica. En definitiva, es importante tener en cuenta que este lugar encierra un gran valor espiritual y que su visita es significativa para quienes buscan un lugar para orar, meditar y encontrar la tranquilidad que brinda la naturaleza.
9. Paseo de los Españoles
Si estás buscando un lugar para pasar una tarde al aire libre en Tandil, definitivamente recomendamos visitar el Parque Paseo de los Españoles. Este parque está ubicado frente al lago y cuenta con un hermoso laberinto de ligustrinas que puede ser divertido tanto para chicos como para adultos. Además, en los alrededores del parque hay un área para caminar con un puente y una feria de artesanías para visitar.
Una de las principales ventajas de este parque es su gran tamaño y lo bien cuidado que está. Puedes encontrar varias áreas para descansar, tomar mate y disfrutar en compañía de familiares y amigos. Además, el laberinto es muy llamativo y entretenido, por lo que es una excelente opción para quienes buscan actividades divertidas para hacer con niños.
Sin embargo, hay que mencionar que la señalética en el parque necesita mantenimiento y renovación, pues hay algunas señales dañadas y oxidadas. Además, el lago cuenta con un reservorio de agua estancada con papeles y residuos flotantes, lo que afecta su aspecto y la experiencia de quienes lo visitan.
A pesar de algunos detalles a mejorar, consideramos que el Paseo de los Españoles es una excelente opción para disfrutar de la naturaleza y pasar una tarde divertida. Si tienes la oportunidad, no dudes en visitarlo. Y si vas con niños, el laberinto será el lugar perfecto para que se diviertan y se conecten con la naturaleza.
10. Parque del Bicentenario
Si hablamos de parques en Tandil, uno de los que no podemos dejar de visitar es el Parque del Bicentenario. Este lugar ofrece una gran variedad de juegos para niños, aunque es cierto que en la zona de juegos falta proveer sombra para los pequeños en días calurosos. Además, pudimos disfrutar de una escultura del cóndor andino en honor a los 200 años de la patria, así como de una senda aeróbica que permite recorrer el parque conectándolo con otros lugares de la ciudad.
Uno de los detalles menos afortunados de nuestra visita fue que no pudimos encontrar a la señora de violeta, una figura que se destacaba en todas las fotografías del parque. Sin embargo, aunque no pudimos conocerla, pudimos aprovechar la gran cantidad de espacios verdes en los que disfrutamos de la naturaleza y el silencio, algo que no es muy común en plena ciudad. Además, nos encantó la plaza de juegos para los chicos, ¡totalmente impresionante!
El parque cuenta con luminarias casi todas rotas, algo que es un poco decepcionante pero, a pesar de eso, siempre parece estar impecablemente cuidado. Sin duda, uno de los detalles más sorprendentes del lugar es que, a pesar de su tamaño, siempre se puede encontrar un rincón tranquilo y apartado en el que relajarse. Además, tanto el lago como los juegos para niños están siempre impecables, lo que hace que la visita sea un auténtico placer. En definitiva, el Parque del Bicentenario es una visita obligada si buscáis tranquilidad y contacto con la naturaleza en Tandil.
11. El Cerrito
Si estás buscando un lugar para conectar con la naturaleza y relajarte en Tandil, definitivamente tienes que visitar El Cerrito. Este parque es uno de nuestros favoritos, y no solo porque es ideal para compartir un mate o tocar la guitarra. La energía del lugar es impresionante, algo que se percibe rápidamente al caminar por sus senderos rodeados de árboles y vegetación autóctona. Además, las vistas desde la cima del cerro son únicas, algo que no te puedes perder si visitas la ciudad.
Otra ventaja de El Cerrito es que se encuentra en medio de un barrio tranquilo, por lo que es muy fácil llegar y moverse a pie. Además, no es un lugar muy concurrido por turistas, lo que lo hace aún más tranquilo y relajante. Si bien es cierto que la estatua del General San Martín en el parque no es de las mejores, rápidamente uno se olvida de ella al disfrutar de la paz y la belleza del entorno.
En nuestra opinión, El Cerrito es un lugar perfecto para aquellos que quieran desconectar de la rutina y conectarse con la naturaleza, sin tener que alejarse demasiado del centro de la ciudad. Siéntate a contemplar las vistas, leer un libro o simplemente disfrutar de la tranquilidad, ¡no te arrepentirás!
En definitiva, coincidimos con los usuarios que han visitado El Cerrito y han destacado su belleza, tranquilidad y energía positiva. Para nosotros, este parque es uno de los secretos mejor guardados de Tandil y lo recomendamos 100%. Si tienes planes de visitar la ciudad, no dudes en incluirlo en tu itinerario, ¡no te arrepentirás!
En definitiva, los parques y atracciones naturales de Tandil son un tesoro por descubrir. Esperamos que con este artículo hayamos despertado en ti el interés por visitar esta ciudad y explorar todos los lugares que mencionamos. Si ya has estado allí, nos encantaría leer tus comentarios y recomendaciones de otros lugares para agregar a nuestra lista. ¡Únete a la conversación y comparte con nosotros tus experiencias en Tandil!